Los libertarios admitieron que el Gobierno quiso suspender la sesión por Lijo y García-Mansilla: “A nadie le gusta perder”

Tras el revés por el rechazo del Senado a los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, desde el propio entorno libertario admitieron que el Gobierno, advertido de que no tendría número, quiso suspender esa sesión.

“A nadie le gusta perder", señaló el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, que condujo la sesión debido a que la vicepresidenta Victoria Villarruel estuvo a cargo del Poder Ejecutivo por el viaje del mandatario Javier Milei a Estados Unidos, una iniciativa también frustrada porque el jefe de Estado no se trajo de ese país la ansiada foto con Donald Trump.

Abdala sostuvo, en declaraciones a radio Rivadavia, que el objetivo de La Libertad Avanza (LLA) era "congraciar” a ambos juristas, que habían sido designados por Milei por decreto, con el “voto de los senadores", pero, dijo, "lamentablemente la política tuvo un rol importantísimo en lo que es la participación en la Justicia".

"Creemos que hay que integrar rápidamente la Corte. No se pudo hacer con estos dos pliegos, y lamentablemente la política se entromete en algo que el Ejecutivo había solicitado", se quejó.

El legislador abogó por “seguir trabajando para poder integrar la Corte" y lamentó que "lo único que faltaron fueron los votos. La política tiene un rol que participa directamente para estar dentro de la Justicia", insistió.

"Ojalá la política nos acompañe cuando haya que votar los pliegos de otros ciudadanos cuando tengamos que trabajar en una institución tan importante como es la Justicia, que debe tener un rol independiente", añadió.

Sobre García-Mansilla, que había llegado a jurar en la Corte, Abdala sostuvo que permanecer o no en el máximo tribunal “es una decisión de él”. “No le pudimos dar los dos tercios, a mi modo de ver lo debe resolver él. No corresponde que opine", apuntó.

El Senado rechazó el jueves los pliegos de García-Mansilla y Lijo para la Corte Suprema, con lo que le asestó un duro golpe al gobierno de Milei, que había propuesto a ambos candidatos por DNU. El pliego de García-Mansilla, quien había llegado a jurar en el máximo tribunal, cosechó 51 votos negativos y Lijo 43, lo que frustró el ingreso de ambos para cubrir las dos vacantes en el máximo tribunal. 

NAP